El Sagrado Coraz�n de Talagante es un colegio de la Iglesia, as� naci� y as� lo ha se�alado su propia historia.

Obviamente, este pilar fundamental le otorga una mirada en la que no puede estar ausente la visi�n cristiana del mundo y del hombre y la consecuente internalizaci�n de los valores cristianos que garantizan y llevan a plenitud los valores humanos. De esta manera, se pretende formar una persona en b�squeda de la verdad y potenciar en ella una permanente dimensi�n de servicio a sus hermanos, a ejemplo de Jesucristo.

Una comunidad educativa de Iglesia tiene a Jesucristo como fundamento. �l es quien revela y promueve el sentido nuevo de la existencia, transform�ndola y capacitando al hombre a vivirla de manera divina; es decir, a pensar, querer y actuar seg�n el Evangelio.

As� como la iglesia, la comunidad educativa nace y se funda en Jes�s para desarrollar su obra, es decir vivir y celebrar la Fe. Por ello entendemos que la Escuela Cat�lica es entonces y ante todo, una comunidad edificada en torno a Cristo, su misterio y su mensaje, en que maestros, padres de familia, alumnos y personal administrativo, cada uno seg�n sus responsabilidades, viven un estilo de vida t�picamente cristiano.

Una comunidad educativa como la nuestra, invita a que cada ni�o o joven se sienta miembro activo, acogido y respetado, a sentirse protagonista de su propia formaci�n y de su crecimiento en la Fe. Asimismo, espera que las familias asuman en conjunto con el colegio la tarea educativa, ya que �la escuela cat�lica es colaboradora de los padres en la educaci�n de los hijos, y edifica sobre los cimientos que los padres han puesto�.

Un colegio de Iglesia cuenta con profesoras y profesores que se suman a esta idea de comunidad educativa, aportando lo que les es propio de su vocaci�n y/o especializaci�n, con la idea de hacer presente el Evangelio de Cristo en la realidad humana y cultural de la Escuela.

Si nos hemos planteado la tarea de la Comunidad Educativa como el gran desaf�o de nuestra identidad de Iglesia, es porque entendemos que todos los que en nuestro colegio trabajan est�n llamados a colaborar seg�n su rol y posibilidades en la tarea formadora. As� la formaci�n no es s�lo tarea de las familias y profesores, cada miembro del colegio, en los tiempos y espacios que les sean posibles, est�n llamados a activar esta vocaci�n. Los espacios de relaci�n informal, las conversaciones de pasillos, recreos u otras situaciones, son siempre una oportunidad para formar no s�lo con la palabra sino especialmente con el testimonio.

De esta forma, Educaci�n y Fe cristiana, elementos fundamentales de nuestra cultura, encuentran en la escuela el espacio propicio para su desarrollo. Donde la pedagog�a de Cristo con sus disc�pulos es un modelo pedag�gico fundante, que permite la relaci�n Fe-Cultura-Vida sea estrech�sima, y nos ofrezca valores, sentimientos y criterios de discernimiento que est�n a disposici�n del proceso educativo.

Sobre la base de estos principios fundamentales que orientan nuestra acci�n, pretendemos seguir desarrollando la tarea que hace tantos a�os se pusieron quienes bajo la inspiraci�n del Se�or Jes�s fundaron el Sagrado Coraz�n para el servicio de la comunidad de Talagante, sus familias y su iglesia.

En la actualidad y en el contexto de revalorizaci�n de la educaci�n por medio de la Reforma de la Educaci�n chilena, la Iglesia renueva su convicci�n y confianza en que esta acci�n garantiza el desarrollo sustentable del pa�s y constituye para ella un espacio y oportunidad de privilegio para promover la inculturaci�n del Evangelio.

En este marco de referencia se inserta el ideario del colegio Sagrado Coraz�n de Talagante, haciendo coherente este conjunto de valores y creencias con su Proyecto Curricular, que e la comprensi�n m�s amplia que el colegio tiene de �ste incorpora tanto lo acad�mico como lo formativo, como tambi�n con su propia forma de organizarse y de llevar a cabo planes y proyectos institucionales a trav�s de un camino organizado y sistem�tico.